El primer paso es determinar qué tipo de estructura legal es la más adecuada para tu negocio. Las opciones comunes incluyen una empresa unipersonal (sole proprietorship), sociedad (partnership), corporación (corporation) o una empresa de responsabilidad limitada (limited liability company). Cada estructura tiene diferentes implicaciones en cuanto a responsabilidad legal, impuestos y requisitos de registro.

Obtener los permisos y licencias necesarios: Dependiendo del tipo de negocio y la ubicación geográfica, es posible que necesites obtener permisos y licencias adicionales a nivel estatal o local. Estos permisos pueden incluir licencias comerciales, autorizaciones sanitarias, permisos de construcción, entre otros. Es importante investigar y cumplir con los requisitos específicos de tu industria y ubicación.

Una vez que hayas elegido la estructura legal, debes registrar tu negocio a nivel estatal. Esto implica presentar los documentos requeridos y pagar las tarifas correspondientes en la oficina estatal o agencia encargada de los registros comerciales. El proceso de registro puede variar según el estado, pero generalmente implica completar un formulario de solicitud y proporcionar información básica sobre la empresa, como su nombre, dirección, estructura legal y actividad principal.

​Después de registrar tu negocio a nivel estatal, generalmente necesitarás obtener un número de identificación fiscal (EIN, por sus siglas en inglés) de la Administración de Impuestos Internos (IRS). Este número es necesario para propósitos de impuestos y te permite realizar transacciones comerciales, contratar empleados y abrir cuentas bancarias a nombre de tu empresa.